CLAVE RA0045

RANCHO NO. 45

MAR-ABR. DE 1989

AUTORES: Ing. M.S. Fernando Ibarra F.

Ing. M.S. Martha Martín Rivera

Biol. Héctor Miranda Zarazua

�POR QUÉ UTILIZAR EL FUEGO EN PRADERAS DE BUFFEL?

El fuego ha sido empleado desde hace miles de años por el hombre, con diversos fines, entre los que destaca: su uso para controlar vegetación en agostaderos con fines de desmonte, para realizar agricultura y capturar animales de caza, así como para atraer fauna silvestre hacia las áreas quemadas, generalmente preferidas debido al rebrote suculento del zacate. Recientemente, uno de los principales problemas que más preocupa a los productores, es la facilidad con que las praderas de buffel se infestan con arbustos indeseables, reduciendo considerablemente la producción de forraje de las mismas. El costo del desmonte y preparación del terreno para la siembra de zacate es alto y si no se corrige el problema de invasión de arbustos, se corre el riesgo de perder la pradera.

El alto costo de la maquinaria, mano de obra, combustible y el riesgo que implica el uso de herbicidas, ha colocado al fuego como una alternativa favorable para mejorar agostaderos y praderas de buffel en forma práctica y económica.

�PARA QUÉ SE QUEMA?

En forma general se quema cuando se desea cumplir con uno o varios de los siguientes objetivos?

– Controlar arbustos y plantas indeseables.

– Destruir material viejo o duro y muerto de los zacates.

– Incrementar la producción, gustosidad y utilización del forraje.

– Mejorar el pastoreo a través de la distribución del ganado en áreas poco preferidas.

– Brindar acceso y disponibilidad de forraje para los animales en pastoreo en áreas densamente invadidas por arbustos.

– Iniciar el rebrote de las plantas de 1 a 3 semanas más temprano.

– Incrementar temporalmente el contenido nutritivo del forraje.

– Adicionar nutrientes al suelo por medio de la ceniza.

– Rejuvenecer plantas leñosas para estimular la producción de rebrotes para los animales.

– Reducir y controlar insectos en la pradera.

�QUÉ ES EL FUEGO PRESCRITO?

El fuego prescrito no es más que un fuego debidamente programado y sistemáticamente planeado que se realiza en una pradera para diferentes fines; en donde el suelo, la vegetación y el clima son favorables y la intensidad del fuego es la adecuada para satisfacer las necesidades que se planearon en determinada área, con el fin de incrementar la producción y productividad de las praderas.

�CUÁLES SON LAS VENTAJAS DE USAR FUEGO?

Se obtienen buenos resultados en suelos de agostaderos en donde otros métodos no pueden ser aplicados eficientemente, con excepción del peligro de erosión en sitios altamente erosionables, puede ser aplicado independientemente de la pedregosidad del suelo y de lo pronunciado de la pendiente o irregularidad del terreno. Requiere maquinaria sólo para trazo de brechas y patrullaje después del fuego. Es mínimo el disturbio en la superficie del suelo y se pueden cubrir grandes extensiones en corto tiempo y a bajo costo, además de que puede ser aplicado donde no exista disponibilidad de maquinaria.

Para que el fuego sea justificado, se requiere que exista en la pradera por lo menos 2 toneladas de forraje o material combustible fino por hectárea regularmente distribuido. El fuego no es de ninguna manera un “CURA TODO” ni la única alternativa, pero si es usado adecuadamente, puede ser un arma muy efectiva; existiendo el riesgo desde luego de perjudicar la pradera si se aplica inadecuadamente. Esta práctica es algunas veces mejor cuando se utiliza en combinación con otras prácticas de manejo, como pastoreo, mecánicas y químicas.

�CUÁL ES LA DIFERENCIA ENTRE EL FUEGO PLANEADO Y EL ACCIDENTAL?

El fuego accidental o no planeado normalmente se origina como su nombre lo indica, por accidente y generalmente ocurre en años secos. El fuego prescrito es planeado y usualmente aplicado con todas las condiciones óptimas tanto de clima como suelo y vegetación. Los fuegos accidentales por lo general incrementan las condiciones de sequía: sin embargo, las quemas planeadas, son benéficas ya que se aplican cuando las condiciones de humedad en el suelo son adecuadas para el rebrote rápido de las plantas. Los fuegos accidentales ocurren generalmente después de que excesivas cantidades de material combustible se acumula, son difíciles de controlar y pueden cuasarle daño a la pradera; mientras que el fuego aplicado propiamente, no debe de causarle daño a la vegetación deseada. Los fuegos accidentales pueden ocurrir cuando las plantas de buffel están rebrotando y son las que debemos proteger, porque son mas susceptibles al fuego. El fuego programado puede ser calendarizado para no dañar a las plantas deseables, en períodos donde no están creciendo, con el fin de remover material duro, seco y viejo, que además de lastimar al ganado es de poco valor nutritivo.

�QUÉ ES UNA QUEMA PARA MATAR ARBUSTOS?

Es una quema que se planea para producir el calor más intenso posible con el fin de hacer el mayor daño a los arbustos. Se emplea en praderas altamente invadidas por arbustos, pero que a la vez tienen forraje suficiente para producir calor intenso. Son fuegos difíciles de controlar, ya que por necesidad tienen que ser intensamente calientes y se aplican a favor de la dirección del viento. El número de quemas que se requieren para mejorar una pradera, dependen de el grado de invasión de los arbustos y la planta a controlar. Existen plantas como la Rama Blanca que se puede casi controlar en su totalidad después de un solo fuego muy intenso y plantas como el mezquite que puede requerir hasta dos y tres quemas periódicas para lograr un control bueno. Las quemas no se recomiendan en años consecutivos en zonas con riesgos de baja precipitación, a menos que las condiciones de humedad sean altamente favorables.

�QUÉ ES UNA QUEMA PARA MANTENIMIENTO?

Es una quema que se planea con el fin de producir calor con poca intensidad, con la finalidad de causar el menor daño posible, a la base del zacate. La intensidad del fuego es suficiente para destruir material viejo acumulado en la base de las plantas e inclusive, matar plantas jóvenes de arbustos indeseables. Se caracteriza porque las llamas se desplazan en forma lenta y alcanzan poca altura, razón por la cual, difícilmente perjudican arbustos y árboles grandes. Son fuegos relativamente fáciles de controlar y se aplican por lo general, en contra de la dirección del viento.

�CUÁL ES LA DIFERENCIA ENTRE EL FUEGO A FAVOR Y EN CONTRA DE LA DIRECCIÓN DEL VIENTO?

El fuego a favor de la dirección del viento se mueve más rápido y genera mucho más calor que el fuego en contra de la dirección del viento; las llamas en los fuegos a favor de la dirección del viento son altas, mientras que los fuegos en contra, las llamas son bajas, se mueven cerca de la superficie y producen calor menos intenso.

El fuego a favor de la dirección del viento es normalmente más perjudicial para las plantas herbáceas de hoja ancha y arbustos leñosos, este tipo de fuego es dirigido por el viento y ocasiona que el material combustible debido al intenso calor, se encienda adelante del frente de fuego (raya lumbre). La máxima temperatura en este tipo de fuego, ocurre a lo largo del frente del fuego y daña más las partes aéreas de las plantas. Los zacates son protegidos ya que la parte más caliente del frente del fuego se encuentra bastante elevada, por arriba de la base de los zacates y el crecimiento o rebrote de muchas especies indeseables de hoja ancha son afectados.

�MATA EL FUEGO A TODOS LOS ARBUSTOS INDESEABLES?

No, el fuego como puede matar desde la raíz a ciertos arbustos, puede sólo afectar la parte aérea de otros y puede dañar tanto a los arbustos deseables como los indeseables. Para que una planta sea muerta por el fuego, debe de ser incapaz de rebrotar después de quemada. Por lo general, gran cantidad de arbustos presentan resistencia al fuego y rebrotan de la base del tronco o por debajo de la superficie del suelo. El efecto del fuego en este tipo de plantas es sólo temporal y con el paso del tiempo esas praderas se reinvaden nuevamente, sin embargo, una reducción temporal en el crecimiento de los arbustos por 3 ó 4 años, puede justificar el uso de esta práctica, si se considera que los zacates de la pradera pueden tomar ventaja de lo anterior.

�CUÁLES SON LOS ARBUSTOS MÁS DIFÍCILES DE MATAR?

Independientemente de la especie, los arbustos más resistentes al fuego son los más viejos, los de mayor diámetro de tronco, los de madera más dura, los de corteza más ancha y los más altos. En forma general, entre mayor sea el arbusto que se requiere controlar, mayor es la temperatura necesaria requerida para matarlo.

Las plantas resistentes al fuego por lo general, son las que tienen raíces que crecen más profundas en el suelo, aquellas con sistemas radicular pivotante que puede regenerarse por debajo de la corona de la raíz y aquellas que rápidamente se reestablecen por medio de semilla, después del fuego. Los arbustos pequeños y jóvenes son mucho más fácil de matar.

Por otra parte, los arbustos que presentan rebrote considerable son más dañados por un fuego intenso que los arbustos que no han iniciado rebrote. Son especialmente susceptibles al fuego los arbustos que se queman durante o inmediatamente antes de una sequía prolongada.

�POR QUÉ TOLERAN MÁS AL FUEGO LOS ZACATES QUE LOS ARBUSTOS?

Los zacates perennes son generalmente más tolerantes al fuego que los arbustos. Dentro del grupo de los zacates existen también plantas más tolerantes al fuego que otras. En el caso específico del buffel se le considera una planta resistente al fuego, ya que responde favorablemente a la aplicación del mismo. La tolerancia de los zacates al fuego, se debe principalmente a que tienen las yemas de crecimiento localizadas en la base o por debajo de la base de la cepa, muy cerca de la superficie del suelo y están relativamente bien protegidas del daño del fuego. Los arbustos, sin embargo, tienen las yemas de crecimiento localizadas en las partes terminales de las ramas, expuestas a las llamas y solamente pueden rebrotar aquellos que tienen células de crecimiento en la base de las plantas o por debajo de la superficie del suelo.

�QUÉ TAN SEGUIDO SE DEBE QUEMAR?

Quemar muy frecuentemente, además de ser impráctico e incosteable, puede causarle daño al buffel, ya que se reduce fuertemente la reserva de alimento en las raíces del zacate, pudiendo ocasionar la muerte de gran cantidad de plantas, principalmente en áreas con precipitación errática y limitada. La quema frecuente cada 3 ó 4 años se puede justificar bajo circunstancias específicas, como cuando se planea reducir altas densidades de arbustos, en donde la periodicidad del fuego se puede ir alargando a medida que la densidad de arbustos tiende a reducirse. En estudios realizados en praderas de buffel con problemas de alta invasión de rama blanca, se ha encontrado que una sola quema bien aplicada, con bastante forraje puede ser tan o más efectiva que varias quemas en años consecutivos o alternos cuando se dispone de poco forraje. Esto es debido a que los fuegos consecutivos en una misma pradera, van siendo cada vez menos intensos como resultado de la cada vez más escasa acumulación de material viejo, en la base del zacate y de mantillo en el suelo. A menos que se persigan objetivos específicos, se debe dejar descansar la pradera por lo menos durante 3 años, antes de volver a quemar, con un período máximo entre fuegos de 6 a 7 años.

�POR QUÉ ES RECOMENDABLE DIFERIR EL PASTOREO ANTES Y DESPUÉS DE QUEMAR?

Es necesario el diferimiento o descanso del pastoreo en el potrero antes de quemar, con el objetivo de permitir acumulación de forraje o combustible suficiente para realizar la quema. Las áreas quemadas son especialmente preferidas por el ganado que gusta de pastorear forraje verde y suculento, razón por la que se debe de dar especial atención, ya que la acumulación del ganado y la presión intensa de pastoreo puede dañar seriamente al Buffel, principalmente al inicio del rebrote que es cuando se encuentra más débil y con bajas reservas de nutrientes en las raíces. Después de la quema es recomendable permitir al zacate alcanzar su tamaño normal antes de iniciar el pastoreo, tratando de utilizar no más del 30% ó 40% de su producción, pudiendo pastorearlo normalmente el siguiente año si las condiciones climatológicas son adecuadas; cuando la lluvia es tan escasa después de quemar, que ocasione que el zacate se quede demasiado chico, es preferible no pastorear la pradera hasta que se recupere con las lluvias del siguiente verano.

�GANA MÁS PESO EL GANADO EN PRADERAS QUEMADAS?

Sí, con un manejo adecuado de la pradera se obtienen ganancias de peso superiores en áreas quemadas que las no quemadas, dichos aumentos se deben a la calidad nutritiva y a la mayor cantidad de forraje tierno disponible, así como, al menor tiempo de pastoreo requerido por los animales para llenarse. Por efecto del fuego en la pradera se reduce la fibra cruda, celulosa y ligninia en el forraje y se incrementa la producción, digestibilidad, proteína cruda, extracto etéreo, extracto libre de nitrógeno, cenizas y fósforo. El incremento en la calidad y cantidad de forraje en las áreas quemadas de buffel, ha permitido producir forraje suficiente para pastorear en años buenos con un 30 a 100% de carga adicional. Las mejores ganancias de peso se han logrado durante el 1ro. y 2do. verano después de la quema, sobre todo, cuando es seguida de un verano con buena lluvia, con lo que se han logrado ganancias de peso en vaquillas 10 a 20% superiores a las logradas con cargas similares en praderas de buffel no expuestas al fuego.

Actualmente se siguen desarrollando nuevas técnicas en el uso del fuego con el fin de lograr una mayor producción de carne por hectárea en las praderas de buffel.

�QUÉ RESULTADOS SE HAN LOGRADO CON EL FUEGO EN SONORA?

Con quemas para control de arbustos en praderas con 2300 kg de combustible por hectárea se ha logrado controlar en un 100% el garambullo, salicieso y cola de caballo, en un 73% el romerillo, en un 60% el huizache y en un 55% la rama blanca, en un 51% la uña de gato, en un 31% el mezquite, en un 22% la condalia, en un 16% el licium y en menos de 10% la gallinita y sangregado. En praderas con 4600 kg de forraje al momento del fuego se logra controlar en un 72% el chírahui. Para el caso de rama blanca se ha encontrado que a mayor forraje al momento del fuego mayor mortalidad del arbusto, logrando matar el 29% de plantas con una tonelada/ha, 46% con 2, 69% con 3, 89% con 4 y hasta el 98% con más de 4.5 ton/ha.

La producción de forraje del buffel en áreas quemadas, se incrementa entre 500 y 1900 kg de materia seca por hectárea cuando se realizan en años con precipitación normal o arriba de lo normal, aunque cuando se quema en años secos el incremento en la producción no se refleja muchas veces hasta el siguiente verano con la presencia de lluvias normales.